2 de junio de 2014

¿Por qué abdica el Juankar?

Por dónde empezar.., es difícil, pero parece que el rey Juan Carlos I se cae de la lista del mundial. Lo que ha pasado hoy, 2 de junio de 2014, es un acontecimiento histórico que probablemente tengan que estudiar nuestros hijos cuando se estén preparando para selectividad.

Al igual que la mayoría de los españoles, es la primera abdicación que vivo y, a priori, no sé que consecuencias políticas puede traer esto, pero de lo que estoy seguro es que lo que acaba de ocurrir no es moco de pavo. 

Tras el comunicado de Mariano Rajoy en Moncloa, la pregunta que ha empezado a surgir en las cabecitas de las personas es la siguiente: ¿y ahora, por qué no tener una república? Sin embargo, lo que yo creo que deberíamos preguntarnos en primer lugar es: ¿por qué abdica el rey? Quizás así podríamos ver por donde van a ir los tiros. 

En primer lugar, el Rey está ya un poco viejete y empieza  a tener problemas de juventud, al igual que su reinado. Son ya cuarenta años en la jefatura de Estado y la nueva sociedad española se estaba empezando a ver poco identificada con la figura de un monarca que cumplió hace años el objetivo que se le marcó. 

Además de la longevidad de su reinado, hay que tener en cuenta la crisis institucional que atraviesa la Casa Real Española, salpicada por casos como el de Urdangarín o la mítica Corina que han contribuido a deteriorar la imagen de Juan Carlos. 

Dicho esto, no me quiero extender más en estas "minucias". Y sí, digo minucias porque lo anterior creo que se podría usar como una excusa o velo para encubrir el verdadero motivo por el que nuestro Juankar ha dimitido.

Puede que tenga una mente demasiado perversa o enrevesada, pero me parece a mí que el Rey ha abdicado porque dentro de año y medio, cuando se celebren las próximas elecciones generales podría no haber en el parlamento una mayoría de partidos políticos monárquicos. 

Me explico. Cuando un Rey abdica, el parlamento tiene que elaborar una ley orgánica con la que se propondría el nuevo monarca. Puesto que la ley orgánica se presenta en las cortes, tiene que ser votada por los partidos, y si ésta se aprueba por mayoría pues...habemus monarca. 

Pero viendo los toros desde el otro lado, ¿qué pasaría si los diputados denegaran dicha ley, y por ende, el nuevo rey? Pues efectivamente amigos, tendríamos una república. Sé que esta teoría es un poco enrevesada, pero todos sabemos que viendo los resultados de las europeas, hay muchas papeletas para que en las próximas generales la mayoría absoluta la tengan partidos declarados republicanos ( Izquierda Unida y Podemos).

Con la abdicación del rey durante esta legislatura, Juan Carlos I garantiza el nombramiento de su hijo Felipe, y por tanto, la continuación de la monarquía. 

Es la primera vez que PP y PSOE ven peligrar su bipartidismo, al igual que es la primera vez que el Rey ve peligrar la continuidad de su trono. 
Dicho esto, querido lector, tú decides si creer en las casualidades.